con foie gras y sin oca

Entre que me hallo y no me hallan, pues aquí les va esto

sábado, enero 29, 2005

Fuera de lugar

El curso estuvo bastante bueno, es increíble cómo el arte puede curar, o en el más simple de los casos hacer que las enfermedades sean más llevaderas. Lo poco exitoso de todo esto del arte terapia es que no se aplica en muchos hospitales y por ende no es algo conocido.
Pues algo bueno de ello es que ahora soy menos ignorante en ese aspecto y que ¡¡¡¡tengo un tema de tesis!!! hay gente especialista que conocí y que puede resultar muy útil pa entrevistas y testimonios.
Contra, sí hubo puros actores y gente preparada en el tema, lo cual yo ni pio. Bueno, había dos seños medio gatorronas pero entusiastas. Muejeres feas y con desagradable traspiración sobacal (esa palabra no creo que exista pero se entiende), mas empresndedoras y trabajadoras (sí, como Martita).
Yo fui la periodista amargada y cerrada que no quería exponer sus problemas hacia las terapias desgarradoras. La que (como mal acostumbro) cabebceó y perdió levemente el sentido a causa de los altos grados centígrados del lugar y de las desveladas innecesarias asisitiendo al televisor hasta altas horas de la madrugada.
Pro, habrá dos cursos más para reivindicar mi imagen y sentirme menos pior (si, porque pior es peor que peor).

miércoles, enero 26, 2005

Ya pasó, ya pasó

Pues no fue la Paca. Nah, ni me importaba tanto, iré otra vez los miércoles y tendré horas libres entre clases... Pues ya que, lo que me duele es que no estaré con mi amiguita en ninguna materia ni con Carlitos, con mi noviecillo creo que en 2, bueno, eso es sano.
Por otro lado, hoy inicio cursos de arte como terapia, suenan bien, sólo espero no ser la única idiota que no sabe ni que pedo con eso. Según la convocatoria, el perfil era para artistas relacionados con espectáculos dirigidos a hospitales, pero pueeeeeeeeeeeees. Una inexperta, joven y bella estudiante de periodismo no puede estar tan fuera de lugar entre tanto master ¿o sí?

Horror, síndrome preinscripción!!!!!

Bueno, supuestamente ya tengo a los maestros que posiblemente quiera pal próximo semestre. La indecisión continúa. No se si quiero a la Paca barco o a Fátima vacasagrada. La primera rellena huecos de horario y la segunda es buena, podría a iniciar bien la tesis y es periodista... difícil decisión.

miércoles, enero 19, 2005

Horror, publicación de horarios!!!!!

De nuevo el dolor de cabeza. Las vacaciones agonizan y hay que pensar en maestros, horarios, planes convenientes...como siempre, tengo una vaga idea de lo que debo hacer pero mis inseguridades arruinana esa desición. Y falta ver (que con ese sistema electrónico de inscripción) como me va.
El semestre pasado me agandallé de la página desde que dieron las 9:00 y gracias a que muchos despistados (cabe aclarar que de no ser por Bere yo lo hubiera sido también) estuvieron formados en enormes filas dentro de la facutad, pude meter por vez primera en toda la carrera los profes que quería.
Ahora, con la segunda aplicación de ese sistema nuevo, vinieron reformas justicieras que no favorecen en nada a me aprovechada persona. Bueno, nimodo, que los de 10 absoluto se inscriban primero...
Por ahora, optaré por ese refran de "mas vale malo por conocido que bueno por conocer", y la neta pus ni son tan malos, a ver que pasa. Total, nunca acaba iendome tan mal, hasta eso que tengo suerte.

martes, enero 18, 2005

Otra vez fuera pero dentro de México

Carajo, por qué es que eso me ocurre con frecuencia. No soy una maldita turista de "a veces", pero pus así me pasa.
Hoy desperé bien temprano y de nuevo sentí las sábanas como de hotel. El desayuno si fue huevo esta vez...
Inició mi tour por la ciudad. Debido al frio matador la gente va en la calle con guantes, bufandas, y los que tiene abrigos o chamarras gordas pues las traen, los que no pus de cebollita con un chingo de playeras y suéteres encima (aclaración: esas prendas son tantas que esos personajes se mueven con dificultad y son torpes al caminar o tamarse del tubo del camión).
Vuelvo a Coyoacán. Visito a una mujer llamada Bertha Hiriart, recojo papeles firmados con anterioridad y me dirijo al hospital 20 de noviembre. Raro, no había vuelto por ahí desde que nací.
Llego al lugar casi sin perderme. Alegría, mi habilidad tamando peceros y bajándome no tan lejos de donde debo me tiene sorprendida. La próxima visita es a una señora llamada Cecilia Kamen, narradora oral y coreógrafa. La direccíón indicaba que debía ir a la avenida Coyoacán. Localizada. Multifamiliares (eso sonaba a viviendas feas). Localizados.Ahora edificio H. Localizado. Departamento 435, ¿cuarto piso no?, si, localizado aunque el viejo elevador me hizo desubicarme ya que tardaba mucho en subir de piso a piso. Llego al lugar, la vita es impresionante, es el 4° piso pero como los anadres son como doble o triples pues estaba en un lugar muy alto con vista urbana impresionante.
Conocía Cecilia Kamen, señora amable a la cual le causó admiración un libro de Cortazar que devoro en estos días de vacaciones. Ella era argentina y eso del libro tabicón hizo que yo le agradara mucho. Tanto que me dio sus datos y me dijo la buscara para cualquier cosa que necesitara, le tomaré la palabra pues nunca se sabe cuándo será necesaria, bueno, me aclaró que para todo menos crímenes y préstamos monetarios.
Bueno, ahora estoy enamorada de esos multifamiliares, son viejos pero re lindos, además el aire huele a galletas marías.
Planes a futuro, tomar cursos de risoterapia.

La panza que crece

Hoy visité Coyoacán, si, nada expléndido, pero lo importante fue la visita a mi prepa 6.
Debía hacer tiempo antes de entregar unos papeles a una sinodal...bla bla bla trabajo...Decidí entrar al antiguo recinto de mi pos etapa puberta (bueno, adolescente), pero antes, meterme en el papel escolapio pa' no parecer extraña en ese ambiente tan familiar hace ya casi cuatro años.
Pues como de costumbre, fui al puesto garnachas grasosas y pedí mi típica gordita de chicharrón. Todo igua, hasta las mejillas rosadas de las que atienden. La sorpresa ocurrió cuando me entregaron el alimento. Su diámetro era como de 25cm aprox. jajajaja, bueno, pues ni modo, debí analizar el tamaño de esa cosa y mi poca hambre antes de hacerle caso a mis antojos.
Fue forzozo comprar algo de beber para ayudar al estómago a pasar semejante bola de masa, el buen y mexicano boing fue la opción.
Siguiendo la costumbre, me senté en la jardinera central del patio de cuartos. Escenario: mujercitas y hombrecitas sentados viendo osiosamente gente pasar. Chairos diciendo cosas con gue, gue, gue, las inseparables sandalias de cuero y otros más con su guitarra intentando tocar algo coherente.
Ahí seguía yo, en mi papel preparatoriano, embarrándome los dedos de grasa, crema, queso y salsa y analizando el panorama.
Cambios:
1)reinaguraron la biblioteca el 5 de noviembre del año pasado. Ahora es abierta (que se pueden ver los libros sin tener que pedirlos por medio de papelitos) y hay muchas compus bien nuevas. Por increíble que paresca, hay más y mejores libros de periodismo y literatura latinoamericana que en la facultad (bueno, no es muy difícil superar a eso que llamamos biblioteca). Esta cuenta además con una escalera de emergencia que da justo al espacio chairo de la jardinera (jijijiji) así que opaca su presencia tan anteriormente visible cuando uno entraba por la puerta principal.
2)hay una cancha nueva de basket, si, junto a la otra (mmmmm) y po rfin quitaron esa disque fuente tota llena pasto.
3)Hay salones cerrados quien sabe porqué...(nada trascendental)
4)Los baños los remodelaron, pero siguen oliendo a orines.
5)Escaleras en parte superior de los cuartos equivalentes a las de los otros grados. (?????)
6)El director se llama Apolonio (¿¿¿¿¿¿¿¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡!!!!!!!!!!!!????????)
Pus de ahí en fuera todo sigue igual...

Finalmente terminé con esa gorda, al incorporarme la panza como que se me estiró. Había comido demasiado. Chale. Tenía un boluptuoso estómago y cada que caminaba crecía más. Me recordó a ese cuento de Cortazar en que al individuo le crecen las manos, pero lo mio tuvo una solución: no comer en todo el día ni a la mañana siguiente.
...Sufro las consecuencias...

jueves, enero 06, 2005

Esos días de reyes...

Esta fecha me hace por obligación recordar esos días de reyes, de los mejores de mi vida infante pero también unos de los más desepcionantes. Debo decir a mi favor que no fui una niña pedinche y desconsiderada y que no era mal portada.
La emoción por la visita de los Santos Reyes Magos era algo de lo mejor después de descubrir los juguetes, pero los reclamoa maternales eran de las cosas más espantosas. "Mira, mira, ya vez que no eres tan buena como dices en tu carta. Los reyes magos te están viendo desde allá y no querras que sepan que eres una niña fea y desobediente, ¿verdad?"
Yo, por lo consiguiente, era un "angelito" el día 5 de enero (como si eso limpiara todo lo malo hacho el año anterior, jajajaja).
Había que poner el zapato boleado (si,precisaemnte el zapato porque el requisito era uno, de tal forma que al siguiente día escolar iba con uno sucio y uno reluciente) y dormirse temprano porque si no, los reyes no llegaban.
De todas formas, esa noche nunca dormí, esperaba intranquila para escuchar el rechinido de alguna puerta, las pisadas de uno de mis hermanos o los gitos de emoción en la escalera; cualquier señal que me indicara que ya era el momento de bajar antes de que los desgraciados de mis hermanos tocaran siquiera mis preciados regalos.
La alegría estaba presente, habían aparecido como por arte de magia alguna de las cosas que pedí. La terrible desepción se presentaba cuando me daba cuenta de que no todo era lo que yo solicité. Ejemplo de ello fue que la anhelada *Barbie* que había solicitado años atrás por fin parecía estar ahí, en mi sillón. Volteo la caja y sí era una muñeca tipo aquella, con la pequeña diferencia que su nombre era *Mandy*. Su cabello no era subio y sedoso sino amarillo huevo, crespo y como con un mechon blanco que la hacia lucir como la novia de Frankenstein.
Ironía, la muñeca que toda niña tiene fue la que yo nunca recibí, al igual que los walkman porque lastimaban los oídos.
Lo que siempre recibí fue alguna ropa (el peor regalo para un niño que desea fervientemente juguetes) jamás pedida. En ocasiones aparecían pilas para no sé, "los aparatos de la casa", plastilina (¿?), pegamento industrial (¿¿¿¿¿¿¿???????), entre otros apropiados presentes que una niña como yo usaría.
A pesar de que era un día de alegría, la envídia infantil nunca faltó. Mis primas hablaban por teléfono para decirme lo que les habían traido (claro eran hijas únicas) y pus yo también les decía lo que tenía (bueno, no siempre tan malos los regalos) y de paso lo de mis hermanos pues al fin y al cabo yo también jugaría con sus cosas. Si, creo que esa fecha sacaba lo peor de mi.
Ahora comprendo la insistencia de mis padres por saber lo que les iba a pedir a los reyes. Ja, y para qué si no sabían cuales eran a ciencia cierta nuestros exigentes requerimientos sobre las nuevas tecnologías jugueteras. Cuando veíamos Chabelo en su cama para revisar las opciones lúdicas en los anuncios intemedios, ellos estaban bien dormidos fingiendo poner atensión. "Ah, si si si, se ve bue...zzzzzzzzz".
Por faltas como esa es que mis hermanos y yo llegamos a recibir regalos como la Mandy; un dominó montecarlo ( de ese que juegan los mayores) en lugar de ese maravilloso juego que brillaba en la oscuridad y hacía reacciones en cadena casi solito; un rompecabezas con bello paisaje en lugar de un tren eléctrico; una palapa con bongoes en lugar de la Barbie hawaiana...
Pero ya no apelaré a los reclamos, cuado sea madre vendrá la hora de vengarme, jijijijiji. No, espero que no, juro prestar atención a mis mocositos pa no crearles traumas.

Bueno, pues feliz día de reyes!!!!!!!!!

domingo, enero 02, 2005

Nuevo año, añejos propósitos

Sin más que contar, los propósitos para este años nuevo serán algunos de los reciclados por casi un lustro.
Tratar de cumplir lo que digo, hacer ejercicio, leer más a fondo el periódico, ser menos desesperada, ver menos tv inservible, ser amable y terminar lo que comien