con foie gras y sin oca

Entre que me hallo y no me hallan, pues aquí les va esto

miércoles, febrero 02, 2005

Rose con la "superjefa"

Hoy asistí como colada a un desayuno de tamales y atole que los directivos de Conaculta ofrecieron para los empleados. Bueno, pues yo fui invitada por Florencia, mi dulce jefecita a quien aprecio en demacía.
El encuentro fue en un patio del Helénico, específicamente el "La Capilla", un escenario gótico con pinturas barrocas y techo de madera excesivamente adornado por lo que infiero puede ser churrigueresco (uy esos términos).
La visita anunciada de la poderosa pero mal afamada Sari Bermúdez no fue mito, esta vez sí se apareció. Su característica sonrisa entusiasta y amigable (protocolaria) hacia todos sus súbditos no pudo fallar, de igual modo pasó con el "¿cómo le va?", "¿bonito lugarno?", "¿Pero qué frío hace?" (claro, ella llevaba un atuendo invernal con el cual era imposible congelarse) acompañado de un personalizadoy ligero rose tactíl.
Rompió el hielo después de 20 min de espera con un "bueno, pues me dijeron que estábamos esperando a alguien", lo cual pareció ser el aviso para comenzar.
El arguende fue para dar anuncio de la certificación ISO 9001 a los empleados de Vinculación Cultural por haber aprobado dicha norma. Los discursos, salvo uno, fueron pura paja llena de elogios y saludos para la aparecida y su noble institución. Todo finalizó con una felicitación a ese depatamento del Consejo y el anuncio de que "pus a ver si pa la próxima nos certificamos los que trabajamos en la dirección", es decir los superpoderosos del Conaculta, ja, irónico ¿no?.
Yo salí rayada: tamales, atole, Sari ( jajajajaja, bueno, este no) un calendario organizador grandote grandote y una taza que dejé en las oficinas.